24 de noviembre de 2006

Hasta siempre a Anita O´Day

Vivió rápido pero no murió joven. Anita O'Day (Anita Belle Colton, Chicago, 1919), superviviente de la era dorada de las big bands y la única cantante de jazz de piel blanca comparable a las más grandes -Ella Fitzgerald, Billie Holiday o Sarah Vaughan-, falleció el pasado jueves 23 de noviembre en la ciudad de Los Ángeles, a los 87 años, a causa de una neumonía.

De origen pobre, sobrevivió a los años de la Depresión actuando en los populares maratones de baile que fueron la válvula de escape para una inmensa mayoría de norteamericanos llevados a la miseria por el crack de Wall Street. Fue entonces cuando adoptó el nombre artístico que le acompañaría hasta el fin de sus días: "Me pareció que era un nombre muy enrollado porque, en el argot, O'Day significa pasta, que era lo que yo esperaba hacer".

Tras ser rechazada por Benny Goodman (que prefirió a Peggy Lee), en el año 1941, se unió a la orquesta del baterista Gene Krupa, en cuyas filas militaba el trompetista Roy Eldridge. Anita formaría con Eldridge una de las parejas artísticas interraciales más singulares y menos convencionales del espectáculo. No sólo desafiaron el sistema de apartheid imperante en el país sino que obtuvieron un notable éxito entre los swing fans, tanto negros como blancos, con piezas como Let me off uptown o Drummin' man. El carácter ferozmente independiente de la cantante -"Anita fue la típica hippy prematura", en palabras del crítico Leonard Feather- salió a la luz por el tipo de compañías que frecuentaba pero incluso por el atuendo ausente de todo glamour que utilizaba para sus apariciones en público. Una rebeca y una falda abierta absolutamente anodinas constituían su "escandalosa" indumentaria, tanto dentro como fuera del escenario. Con ello, desafiaba a los críticos y aficionados en su costumbre de juzgar a las cantantes de orquesta únicamente por su apariencia. Además, estaba lo que su atuendo dejaba ver. No en vano, por aquel tiempo, la cantante se ganó un título: el de las piernas más bonitas del jazz.

Tras dejar a Krupa, cantó por un breve tiempo en las orquestas de Woody Herman y Stan Kenton (su versión de And her tears flowed like wine fue uno de los mayores éxitos en la carrera del discutido director de orquesta). Por lo demás, la vida de Anita era un torbellino sin fin de drogas, alcohol, matrimonios, abortos, divorcios... en el año 1947 fue arrestada por primera vez por posesión de marihuana. Cinco años más tarde fue nuevamente detenida y pasó una temporada entre rejas. Después de que su adición a la heroína estuviera a punto de costarle la vida, en los años sesenta, se sometió a una cura de rehabilitación gracias a la cual pudo continuar con su carrera, algo por lo que nadie hubiera apostado un céntimo, y de hecho, siguió cantando hasta los 86 años.

Para el recuerdo quedan sus álbumes grabados junto al arreglista Billy May, en los años cincuenta -su momento de plenitud- para el sello Verve (Anita O'Day swings Cole Porter with Billy May, Anita O'Day and Billy May swing Rodgers And Hart); o su aparición estelar en el Festival de Newport del año 1958, recogida en el filme Jazz on a summer's day. Anita O'Day no se consideraba a sí misma como una cantante sino una "estilista de la canción". Para el fotógrafo William Claxton fue "una mujer extremadamente inteligente con energía para mover un tren"; "una cantante con un contagioso sentido del swing y una febril practicante del scat" (Ellos y Ellas. Las grandes voces del jazz). En el año 1981 vio la luz su autobiografía, Hard times, high times, escrita en colaboración con George Eells (autor de, entre otras, la biografía del actor Robert Mitchum): un "documento de una brutal honestidad" en el que repasa su controvertida existencia a cara descubierta y sin esconderse en ningún momento. Actualmente, se halla próximo a estrenarse un filme documental sobre su vida: Anita O'Day: Life of a jazz singer, con guión de Will Friedwald.

Su paso por nuestro país fue fugaz y tardío. En 1987 actuó en el Festival de Jazz de Madrid, la primera y última ocasión que lo hizo en la capital del Estado. También cantó en Valencia, junto a la orquesta del clarinetista Buddy DeFranco; y en Barcelona, en el año 1970, acompañada por el trío del pianista francés George Arvanitas. Según su representante, Robbie Cavolina, la cantante no tenía hijos ni ningún familiar cercano.

18 de noviembre de 2006

Miles vive

Miles, 15 años después

3 de noviembre de 2006

22 días de Jazz en Madrid

El proyecto musical del pianista Chano Domínguez inaugura esta noche el Festival de Jazz de Madrid, que celebra este año su 23ª edición. En total, la capital española acogerá 35 conciertos durante los próximos 22 días. Artistas españoles, estadounidenses, latinoamericanos y europeos compartirán con el público madrileño las diferentes variantes del jazz.

El certamen que organiza el Ayuntamiento de Madrid comienza este fin de semana con 10 conciertos en varias salas. El pianista gaditano Chano Rodríguez presenta esta noche en el Centro Cultural de la Villa su último disco New Flamenco Sound, un nuevo proyecto en el que se integran nuevos ritmos y lenguaje flamenco. El Teatro Real, el palacio municipal de Congresos y salas como la Riviera, el Café Central, Bogui Jazz, Clamores y el Junco, acogerán las diversas actuaciones del certámen.

A lo largo del tiempo que ocupa el festival, pasarán por estas salas músicos como Dizzy Gillespie, Sara Vaughan, Carmen Mc Rae, Miles Davis, Sonny Rollins, Gerry Mulligan o Max Roach.

En los años ochenta, tuvieron lugar en Madrid los primeros encuentros entre músicos como Paquito D?Rivera, Michel Camilo o Ray Barreto y flamencos como Tomatito, Paco Cepero, el Moro o Gerardo Núñez. Desde entonces, la capital española reúne cada año a los portavoces de las diferentes variantes que adopta el jazz por los países en los que se desarrolla.

Ciclo de cine

De forma complementaria a los conciertos, un ciclo de cine y Jazz comienza este fin de semana en el Centro Cultural de la Villa. Mañana sábado se proyectará la película Swing, de Tony Gatlif y el domingo Exils del mismo director.